La muerte de Jimmy Giménez-Arnau ha conseguido que gran parte del equipo de Sálvame vuelva a reencontrarse. El funeral del periodista se celebró el pasado miércoles, 18 de septiembre, en el tanatorio de Tres Cantos, la localidad madrileña hasta la que se desplazaron numerosos compañeros de la profesión para dar el último adiós al personaje televisivo.

Belén Esteban fue de las primeras en llegar, a la que le siguió Terelu Campos, Gema López, Antonio Montero, Pilar Vidal y María Patiño, entre otros. Aunque la mayoría ha preferido no pronunciarse, esta última sí ha confesado que ella sí coincidió con la hija de María Teresa Campos. A su salida, la periodista contó que “le había dado la mano” cuando se había ido, algo que dejó entrever que continún existiendo ciertas diferencias entre ellas.

Aunque en ese momento no quiso entrar en mayores detalles, sí que lo hizo posteriormente en directo desde el plató de Ni que fuéramos. Patiño ha contado que ella estaba en el interior del tanatorio emocionada junto a Sandra cuando ha entrado Terelu, la cual le ha saludado como al resto de los presentes. Durante su coincidencia, mantuvieron una conversación en grupo en la que hablaron de cómo les gustaría que fuese su entierro y la madre de Alejandra Rubio confesó que a ella le gustaría que se organizase “una fiesta que durase toda la noche”.

A la hora de despedirse, la presentadora ha explicado que la hermana mayor de las Campos comentó que tenía que irse a grabar una cosa, sin especificar exactamente el qué. Antes de irse, Terelu le cogió la mano en gesto cariñoso, tal y como ya avanzó a su salida la propia Patiño. Tras sus palabras, Patiño ha confesado que siente “pena” del distanciamiento que hay entre ambas, a pesar de todo.